Atrás quedaron los días en los que los anfitriones estaban encerrados en la cocina, perdiéndose de los mejores chistes e historias de sus amigos. Desde hace unos años, la tendencia en cocinas es tener un espacio que les permita, mientras preparan la comida o la cena, convivir con los invitados, de esta manera cocinar se siente menos como un trabajo y más como parte de la fiesta.

Una solución es diseñar la cocina en forma de U con isla al centro, así los anfitriones pueden preparar los alimentos mientras los invitados les rodean. Si se prefiere más espacio y cierta privacidad, la isla de trabajo puede estar en la frontera entre el área de la cocina y la sala, así, mientras unos preparan, los amigos están del otro lado sirviéndose las bebidas y comiendo botanas. Mira cómo elegir una cocina con isla en este artículo.

Como invitar a varias personas implica también muchos platos, bandejas y contar con variados utensilios a la mano, los armarios altos son una buena opción, especialmente si la altura es hasta el techo. La capacidad de almacenamiento permitirá tener lo básico en el mismo lugar y así no hay que ir a buscar platos extra en un mueble colocado en otra parte de la casa.

Para los cocineros más celosos de su espacio, mantener un sutil margen entre la cocina y el family room es necesario, y se puede recurrir a una barra para lograrlo. El área, aunque con puerta, es semiabierta y permite la interacción, pero los invitados no estarán transitando por la cocina durante la preparación.

Si, en cambio, se trata de un anfitrión con ganas de que la participación de todos sea una protagonista más de la reunión, en la cocina se pueden incorporar áreas de trabajo en diferentes zonas y repartir las tareas. En ese caso es importante contar con un espa